REPORTAJE
La evolución de un material noble
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José Tolosa Sanchis es presidente
del Grupo Madeplax, grupo em-presarial
con 50 años de trayec-toria
dedicada a la carpintería de
madera, aluminio, vidrio y acero
para hoteles, constructores y
particulares.
Ahora que hemos cumplido 50 años de
trayectoria profesional, la pregunta re-currente
de todas las personas que co-nozco
(y de las que no) es si sabía que
íbamos a llegar tan lejos. Mi respuesta
es siempre un no (o al menos no tan le-jos).
Es entonces cuando mis recuerdos
cobran protagonismo y me trasladan
a mis inicios en este mundo, a los 20
años, cuando mi única premisa era el
de no ser un simple carpintero más.
Comenzamos como la mayoría de ne-gocios,
vimos una oportunidad y fui-mos
a por ella. Las persianas de made-ra
tenían gran demanda y empezamos
a fabricarlas y comercializarlas en un
pequeño taller. Los pedidos llegaron a
tal punto que nuestros proveedores no
podían cubrir nuestra demanda, así que
tuvimos que buscar soluciones, tener la
fábrica fue una de ellas.
No sabíamos decir que no a nuestros
clientes, y eso nos llevó a manufacturar
nuevos géneros. Fue así como nuestra
relación con la madera fue creciendo,
y la fuimos entendiendo y respetando.
No solo estábamos en la obligación de
hacer un producto que cumpliera las
expectativas estéticas, sino también
funcionales.
Sin un conocimiento pleno de la ma-dera
no tendríamos la oportunidad de
evolucionar, por lo que enviamos a
nuestros trabajadores a formarse y nos
percatamos que cada tipo de madera
tenía una mejor utilidad dependiendo
de factores como: tendencias, produc-to
final, fabricación, instalación, ubica-ción,
por mencionar solo algunos.
Otro aspecto importante fue la diver-sificación
geográfica. Desde nuestros
inicios siempre hemos tenido el interés
de buscar la madera en origen, lo que
nos hizo recorrer todos los continentes,
así como conocer los procesos, des-de
la tala hasta su distribución. Con la
apertura de nuevos mercados en paí-ses
diversos adaptamos los productos
manufacturados realizados en madera,
y así aprovechamos al máximo cualida-des
como su resistencia a la humedad
o al fuego.
Con la globalización, no solo compe-tíamos
con otras empresas dedicadas
al rubro, sino también con la aparición
de productos alternativos como el alu-minio
o pvc, por lo que decidimos pro-barlos
y posteriormente adaptarlos a
nuestro catálogo. Aprendimos que la
madera no era insustituible, pero si ini-gualable.
La aparición, profesionalización y espe-cialización
de los diseñadores y deco-radores
de exteriores e interiores han
dado un nuevo impulso a la madera así
como nuestra obligación de adaptarla a
cualquier ambiente, por lo que elemen-tos
sustitutivos estéticos como los dise-ños
en melamina, vinilos, hpl, etc, cada
vez más se comercializan con acabados
excelsos, no solo a la vista sino también
al tacto.
Ha pasado mucho tiempo desde que
empecé a trabajar con la madera y
siempre me ha sorprendido la capaci-dad
de versatilidad y adaptabilidad de
este material, no solo me refiero a sus
características intrínsecas, sino tam-bién
a los factores externos como el
tiempo, las modas, la economía, la eco-logía,
los nuevos productos que siguen
apareciendo; y ha logrado sobrevivir y
adaptarse a todos ellos, y también me
refiero a su protagonista silencioso, el
carpintero que la trabaja.
Tengo que agradecer las experiencias
vividas con la madera, he llegado a apli-carlas
a mi vida profesional y personal,
y a mis 70 años comprendí que mi pre-misa
juvenil era errónea, me he dado
cuenta que ningún carpintero, jamás,
podría ser simple.
JOSÉ TOLOSA, PRESIDENTE
GRUPO MADEPLAX